BRIDGERTON VS HOLLYWOOD

 

BRIDGERTON  VS  HOLLYWOOD

Estas dos producciones distribuidas por el gigante Neflix tienen muchas cosas en común pero resultados muy distintos.

Los Bridgerton, se podría decir, es un híbrido entre una película Disney y Sexo en N.Y.  Hay quien la considera un “Orgullo y prejuicio” con sexo. En mi opinión, es una serie realizada exclusivamente para mujeres, de hecho, hasta las críticas profesionales en espacios de cine, las han realizado mujeres, cosa por otro lado, muy poco habitual. La serie tiene además, todos los elementos políticamente correctos que la industria del cine plantea actualmente, es decir, más protagonismo para mujeres y actores de raza negra. Tanto es así que han convertido al Londres del siglo XIX en una sociedad donde la Reina es negra y los ciudadanos de esta raza tienen los mismos privilegios que los blancos.

La ambientación es totalmente irreal, pero paradójicamente bella y estéticamente llamativa (es como si le hubieran subido la saturación al máximo). La historia está contada como un cuento  infantil, con bailes de príncipes y princesas incluidos. La protagonista, Daphne, es lo bastante poco atractiva y suficientemente inteligente como para gustar al nicho de espectadoras a las que está claramente dirigida la serie. Para mi, lo sorprendente de Los Bridgerton es el éxito que ha tenido no solo entre chicas adolescentes sino entre mujeres de más edad. 

Es una historia boba, predecible, con escenas de sexo poco realista (por Dios, ¿Quién hace el amor de esa forma?) a la manera de Sexo en N.Y., plagada de posturitas estéticamente bonitas, de portada de Interviú.

En cuanto a la otra serie, Hollywood, me ha sorprendido para bien. Está filmada con todos los elementos políticamente correctos al igual que Los Bridgerton, hay afroamericanos, mujeres en el poder, homosexualidad y hasta prostitución. Cuenta positiva y magistralmente una historia, que es dramática y nos la muestra en tono de humor, idílicamente, como si fuera un cuento.

También tiene un final feliz, pero a diferencia de Los Bridgerton, no te lo meten con calzador. Es una historia de valientes en un mundo de conservadurismo e intolerancia. La gran diferencia entre las dos series, es que el espectador aún a sabiendas de que está viendo un cuento seriado, puede prever, que mientras la primera es una copia de cachitos de aquí y allí, Hollywood es lo que pudo haber sido y no fue. Una historia genuina, original, sin tapujos ni cursilerías. Transforma la crudeza de la realidad a través de la inocencia de los sueños de los protagonistas.

Si tuviera que puntuar cada serie le daría a Los Bridgerton un 4 (exclusivamente por la dirección artística) y a Hollywood, un 10 sin lugar a dudas.

Ana Alemán